WEB OFICIAL
Escritor Miguel Pancorbo
Miguel Pancorbo Gutiérrez, es escritor. Autor de la novela: EL JOVEN. Regenta un gimnasio desde hace 23 años, pero no está “cuadrao”, no le hace falta. Es calvo, practica deporte y de vez en cuando va de cañas.
“Escribo y hago deporte, porque así encuentro un enfoque optimista que me ayuda a superar los obstáculos del camino. Y enseño cómo hacerlo a multitud de personas que quieren encontrarlo también”.
Descubre cómo
Súbete al tren donde mogollón de personas han encontrado la vía hacia un nuevo estilo de vida más divertido y saludable.
Recibe los emails de Miguel Pancorbo Gutiérrez de 2 o 3 minutos. Entrar y salir es GRATIS.
Con el conocimiento justo para echar el día.
Una vez, cuando media un metro más o menos, la profe del cole me sacó a leer un poema de una rosa con espinas. Me puse tan nervioso, allí delante de tanto niño que, pude sentir como esas espinas de la rosa se me clavaban en los dedos de la mano al coger ese papel.
Seguí la inercia natural de mi cuerpo y mente, por lo que me puse a llorar por unos segundos, hasta que decidí salir corriendo de clase pegando un portazo tras de mí, huyendo del problema en cuestión. Un problema, que solo había creado mi mente.
Más tarde comprendí que se trata de una reacción del cerebro llamada lucha o huida, la cual está ahí para protegernos de un peligro, pero que a veces, esta reacción sucede sin que exista un peligro real y eso fue lo que me pasó a mí.
Es algo así como pisar el freno y el acelerador de un coche al mismo tiempo. Tú quieres estar ahí parado, tranquilo, leyendo tu poema, pero el corazón se dispara a mil por hora.
Estarás pensando: ¡Pero hombre, eso es miedo escénico! ¡Temor a quedar en ridículo y que se rían de ti!
Llámalo como quieras, pero joder, JODE y mucho jejej.
A superar la ansiedad
A apartar el ego para ser mejor persona
A soportar los golpes de la vida con meditación y una mente calmada
A hacer del deporte un estilo de vida sin morir en el intento
A estar agradecido por lo que tengo, aunque a veces la tristeza intente hundirme
A perderle el miedo a la muerte y a la vida
A ser más eficiente y productivo
En definitiva, a seguir luchando contra lo que se ponga en mi camino, transformando la perspectiva de las cosas a mi favor.
“Mi único interés es escribir textos que te ayuden a pasar un buen rato, e intentar con ellos hacerte reflexionar y encontrar esa chispa de motivación que a todos nos hace falta para mejorar tanto física, como mentalmente. Fácil y sin embrollos”
Uno nunca valora lo que tiene hasta que llega mamá.
Camisetas amontonadas…
Trajes del año la pera de cuando Franco era corneta…
Calcetines de esos que el dedo se sale por el agujero…
Libros de adorno tras el cristal de una estantería, o que su máxima aspiración es que un día sirvan para ponerlos debajo de la pata de una mesa que esté coja…
Pantalones de todas clases cuando siempre nos ponemos los mismos…
Objetos que no sabemos ni para qué sirven…
Pero cuando llega MAMÁ y dice las palabras mágicas:
¿LO QUIERES O LO TIRO?
¡Hay chacha! Que tembleque en las piernas. Ahí ya, sí que nos acordamos.
A veces, nos cuesta deshacernos de cosas que no necesitamos, que nos roban espacio y energía…
Si quieres deshacerte de cosas que no necesitas, como el estrés, la grasa de más, algunos dolores musculares y el mal humor súbete al tren donde mogollón de personas han encontrado la vía hacia un nuevo estilo de vida más divertido y saludable.
Recibe los emails de Miguel Pancorbo Gutiérrez de 2 o 3 minutos. Entrar y salir es GRATIS.
Miguel Pancorbo Gutiérrez, es un escritor que con sus textos, intentará ayudarte a cambiar la perspectiva de las cosas poniéndolas a tu favor. En su novela llamada El Joven, contrasta con eficacia esta postura.
Algunos de los muchos testimonios no solicitados.
EXCELENTE A base de 25 reseñas Yeferson Quintero07/06/2023Verificada Una obra magnífica Una obra que realmente nos hace reflexionar; de alguna manera el lector se puede sentir identificado con algún personaje, debido a las circunstancias que se desarrollan en la novela. De principio a fin siempre con un gesto de enseñanza y de motivación. jose20/12/2022Verificada Te da ganas de vivir! Optimismo. Es un libro que hace que uno se ilusione. Gracias. Mari C.14/12/2022Verificada No Tenere miedo a la vida Muchas gracias Miguel, por adentrarnos en ésta maravillosa aventura y hacernos ver qué sí es posible alcanzar nuestros sueños y convertirlos en un proyecto,y que nunca es tarde para hacerlos realidad. David L11/05/2022Verificada Un libro magnífico Es un libro bastante interesante,me ha encantado leerlo ya que impone mucho👏👏 Sergio Ginestar10/05/2022Verificada ENTRETENIDA Y MUY MOTIVADORA Me ha gustado esta novela por su sencillez narrativa y por su carga emotiva que se ve reflejada en muchas partes del relato. Es motivadora y deja muy claro el espíritu con el que se debe afrontar la vida.La recomendaría. Cliente de Kindle28/04/2022Verificada Gratificante Hace que te enfoques en la lectura, te engancha, te hace reir, casi llorar, pero sobre todo, te hace soñar y ver, que si te lo propones, todo es posible... Cliente Amazon27/04/2022Verificada Muy recomendable No he hecho nada más que empezar y me ha enganchado rápidamente. Lo recomiendo 100% Juan Miguel Moral Liébana27/04/2022Verificada Impresionante Estoy empezando y ya enganchado totalmente. Con 2 capítulos te intrigas por el personaje y te sientes identificado con él en muchos aspectos. Seguiremos leyendo para ver qué me encuentro y sobretodo, esperaré la segunda parte Pedro Liebana27/04/2022Verificada Nunca dejes de ser joven! Hay que apoyar a escritores noveles para que la cultura no decaiga y siga abriendo pasiones.Sobre éste en concreto, sólo decir que su lectura es muy fluida y resulta fácil empatizar con los personajes.El libro transmite la energía que debemos conservar y perpetuar hasta nuestro último día.Lo recomiendo al 100% Paco27/04/2022Verificada Excelente libro Excelente libro, muy ameno y llevadero de leer. Engancha desde principio a fin.
Leer algunas páginas de la novela El Joven.
Capítulo 4
Joder, creo que no he comido más en toda mi vida. Menudo dolor de barriga. Yo que siempre digo que hay que ingerir la comida despacio y bien masticada.
Una buena comida me esperaba en el residencial, más que comerla la he engullido rápidamente, tenía hambre, pero sobre todo ganas de abrir esa bolsa de tela. Subo atropelladamente a mi habitación, cojo la bolsa y me tumbo en la cama, y de nuevo noto una sensación extraña en mi interior, pero esta vez no hay música.
Estoy solo. Solo ante un libro en blanco casi desgarrado por la humedad y el paso del tiempo, pero a pesar de ello, aún conserva su esencia, ese olor de sus páginas, ese tacto que, aunque un poco rugoso, es un tacto que me apasiona. John siempre dice que soy como un libro abierto, pero no en blanco. Aunque, en lo demás, sí que me parezco a este viejo libro; me refiero a mi aspecto exterior. Doy vueltas sobre el libro con la pluma que también había en la bolsa, y supongo que John habrá escrito con ella la nota que hay dentro:
Hola, Juan, sé que esperabas otra cosa. Puedo imaginar la cara que habrás puesto al ver estos regalos, ja, ja, ja, y más aún cuando hayas visto que todas las páginas del libro están en blanco. Seguramente habrás creído que tendría algún contenido tipo: algún enigma, algún mapa del tesoro… Con lo fantástico que eres, menuda decepción te habrás llevado, ja, ja, ja. No hace falta que me lo digas, yo también te conozco muy bien. Bueno, voy al grano. Este libro es muy, pero que muy importante. Cuídalo y guárdalo como decía una gran mujer: «como oro en paño». Te lo he regalado junto a esta pluma para que escribas y rellenes cada una de sus páginas. Claro que se te ocurrirá algo. Tú entiendes de todo. Los años te han dado muchas experiencias. Pues alguna historia, novela, cuento, diario o lo que más te guste. ¡Claro que sí, hombre, claro que puedes hacerlo! Puf, a veces me pones rabiando. ¿Quién ha dicho que tienes que leerlo en público? ¡Que no! Tú escríbelo y ya veremos. No obstante, eso es otra cosa que tendrás que arreglar, lo de leer en público. Te recuerdo que tampoco te atrevías a entrar en la cueva y luego no querías salir. Además, me dijiste que era uno de tus sueños pendientes. Pues ha llegado el momento de tomar cartas en el asunto. Yo confió en ti y sé que este libro será una auténtica pasada, sobre todo por tu manera de enfocar los detalles. Ya sabes que me gusta tu mente y tu imaginación. Eres una gran persona y te mereces cumplir todos tus sueños. Yo te ayudaré a conseguirlo.
No hay de qué, para eso están los amigos. Nos vemos pronto.
Un abrazo, tu amigo,
John
Caramba, me he emocionado, sobre todo por la nota. No sé qué haría sin mi amigo John. Me conoce tan bien… Gracias a él he empezado a rejuvenecer de nuevo. Desde la muerte de Olga nada volvió a ser igual. El mundo se me cayó encima y esa gran casa donde vivíamos acabó resultándome oscura, fría y solitaria sin su presencia. Ya no le encontraba ningún sentido a seguir bajo sus enormes paredes. Entonces, muy a mi pesar, decidí trasladarme al residencial, por lo menos allí cambiaría de aires y podría hablar con otras personas. Si al menos hubiera estado nuestra hija Elisabeth… pero se casó y se fue a vivir con su marido. Ella insistió hasta la extenuación en que me fuera con ellos, pero yo no quería ser una carga. A ella también la echo mucho de menos. Elisabeth es muy parecida a su madre, casi idéntica, diría yo. Ambas con una gran personalidad y siempre sacando el lado positivo de las cosas. Altas y esbeltas, llevaban siempre trenzas en el pelo que se hacían una a la otra. Olga tenía el pelo marrón oscuro como el café y un lunar en la mejilla que me encantaba. Las trenzas de Elisabeth parecían una montaña rusa liadas entre sí. La piel de ambas, como la arena de la playa, y sus ojos podían camuflarse sobre el azul del mar. Sus labios carnosos y pronunciados habitualmente dibujaban una sonrisa. También a ellas les gustaba ponerse camisetas negras de grupos musicales, que dejaban más cortas para lucir un piercing en el ombligo. Elisabeth, Olga y yo éramos como uña y carne, inseparables. Elisabeth, desde muy pequeña, ya saltaba sobre la cama de nuestra habitación escuchando a Los Ramones o a algún otro grupo de los que solíamos poner a todo volumen. La llevábamos a los conciertos de rock, a escalar, de senderismo, a bañarnos al lago, le leíamos libros de ficción por las noches, compartíamos pelis de terror con la luz del salón apagada y cuando venía con nosotros a la cantina era el centro de atención con sus chistes. Aunque ella no lo exteriorizara mucho, sé que ese día, el que falleció su madre, quedó muy afectada, al igual que yo. Olga murió hace veinte cuatro meses, dos semanas y tres días, a los setenta y cinco años de edad. Cuando ella murió, Elisabeth tenía 38 años. Todas las semanas viene a verme, pero hace más de una semana que no ha venido y no logro hablar con ella. Espero que no le haya pasado nada. La verdad es que me resulta muy extraño. Si no vuelve tendré que ir yo mismo a buscarla, aunque últimamente tengo la sensación de estar atrapado en este lugar. Solo espero que esté bien y esto solo sea un contratiempo.
Miguel Pancorbo Gutiérrez, también te arrimará el hombro si así lo deseas, en eso de conseguir un estilo de vida más saludable a través del deporte y algunos consejos relacionados con la salud mental y física.
Así lo viene haciendo desde el año 2000 con los clientes de su centro deportivo Fenixclubfitness y con muchas más personas ajenas a este.
“Si te ves falto de energía y crees que necesites un cambio a nivel mental y físico, pero no sabes por dónde empezar, quizás este lugar sea el adecuado para ti.
Contacta con Miguel y su equipo de entrenadores, cuéntales lo que necesitas o quieres conseguir y ellos te dirán si pueden ayudarte o no”.
Miguel Pancorbo Gutiérrez, a su vez, ha sido capaz de congregar durante 11 años seguidos a miles de aficionados a la montaña, en la carrera llamada RETO ARAQUE, la cual organizaba el mismo junto al Ayuntamiento de Jamilena (Jaén).